Cinco motivos para no soportar a Edurne

Cinco motivos para no soportar a Edurne

No piensen que todo el monte es orégano. Edurne podrá ser muy profesional, buena cantante, disciplinada y hasta atrevida cuando toca, pero también tiene su lado oscuro. ¿Nunca han conocido a alguien tan maravilloso que ha despertado un odio irracional en lo más hondo de su corazón? La nueva representante de España en Eurovisión es prácticamente perfecta en todo, tanto en su vida ideal como en su carrera. Siempre sonriente, siempre ideal, siempre dejando claro que está por encima de nosotros. ¿Se levantará despeinada y con mal aliento? ¿Estará de mal humor los domingos? ¿Le caerán mal sus compañeros de trabajo? Al menos, Soraya Arnelas tuvo la delicadeza de pasar a la posteridad por la polémica del 'poyeya' que la hizo un poco más humana.

Edurne nos fascina y, a la vez, nos asusta. ¿Y si es un robot llegado a la Tierra para crear una raza superior? Por mucho que les guste su forma de cantar, por mucho que estén contentos por su elección para Eurovisión, por mucho que sean 'edurnistas' de pura cepa, aquí les dejamos otros cinco motivos que nos hacen mirarla con desconfianza. Algo huele raro en casa de Edurne.

Es demasiado perfecta para ser real

No nos gusta la gente perfecta, las marisabidillas de la clase, las alumnas aventajas. Nos hacen darnos cuenta de que nosotros no somos tan estupendos y eso es difícil de asumir. Edurne todo lo hace bien. Canta bien, baila bien, interpreta bien, presenta bien, pronuncia bien, posa bien, todo lo hace bien, y eso no podemos tolerarlo. Necesitamos que salga de tono de vez en cuando, que tropiece varias veces con la misma piedra, que nos demuestre que no es tan perfecta como parece. Sólo así podrá ganarse nuestro cariño completo. Debería tomar nota de Gwyneth Paltrow, que de tan perfecta que quiso ser, acabó ganándose la enemistad del pueblo norteamericana. Edurne, puedes ser la siguiente.

Fue la responsable del tema de 'Yo soy Bea'.

En España somos de 'inspirarnos' en las series extranjeras y llevárnosla a nuestro terreno. Uno de los mejores ejemplos fue 'Yo soy Bea', la versión española de la original 'Betty, la fea'. Mientras en Estados Unidos tiraron la casa por la ventana con 'Ugly Betty', nosotros nos conformamos con una copia barateja. Y no contentos con eso, la alargamos hasta el infinito, incluso cambiando a la propia Bea por otra. Edurne fue la encargada de interpretar la canción principal de la serie, todo un honor del que todavía no debe haberse recuperado. Por arruinarnos la siesta con su machacona melodía, nominamos a Edurne como la peor pesadilla de los españolas.

Publicó un disco con versiones de musicales

Las discográficas, cuando todavía hacían negocio vendiendo discos, tenían encargos guardados en el cajón, que aprovechaban para endosar a los recién llegados. Le pasó a Roser, aquella rubia que salió del concurso 'Popstars', que grabó un disco de versiones de Raffaella Carrà y hundió su incipiente carrera. Edurne tuvo un poco más de suerte -poca- y tuvo que pasar por el trago de publicar una recopilación de versiones de canciones de musicales. El disco fue un fracaso, como era de esperar, pero la cantante consiguió amortizarlo gracias a su participación en el musical de 'Grease'. Algo es algo, pero el trauma nos lo quedamos nosotros y eso tampoco se lo perdonamos.

Debutó como actriz en 'Ana y los siete'

Edurne ha hecho de todo en esta vida. Ha sido cantante, presentadora, bailarina, actriz y tornadora-fresadora porque no le han dejado. Entre su curriculum como intérprete destaca su primera papel importante, el de Rebeca en 'Ana y los siete', el éxito creado por Ana Obregón. Edurne, como no, hizo de chica guapa y perfecta, algo que le venía como anillo al dedo. Aun así, tampoco estuvo muchos capítulos. De ahí pasó a 'Hospital central' y 'Cambio de clase' en Disney Channel. Una carrera, como ven, trepidante. No se extrañen si después de Eurovisión le ofrecen un papel en alguna película. A este ritmo, acaba siendo chica Almodovar. Y si no, al tiempo.

Su escote le roba todo el protagonismo. Conseguir un trending topic en Twitter en un hito en la sociedad actual -pueden preguntárselo a Mariló Montero, una auténtica especialista-, pero casi nunca se consiguen por logros profesionales. Edurne lleva meses siendo una de las famosas más comentadas en esta red social. ¿Por su profesionalidad? No, por su escote. La manía de la cantante de vestir como si estuviese en un eterno especial de Navidad ha hecho que su escote se convierta en lo más comentado -con excepción del vestido transparente de Cristina Pedroche-. Y no es que no tenga tipo para lucirlo, es que nos gustaría ver otras facetas suyas. Un cuello vuelto, un abrigo, una bonita americana, algo que fuese un palabra de honor. ¿Es demasiado pedir? Miedo nos da como puede ser su estilismo para Eurovisión. ¿Irá desnuda?

elmundo.es, 15.01.15

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