A pesar de que esta ciudad de la Costa Brava está para siempre ligada a la figura del artista, así como la zona de Portlligat, Dalí también iba más lejos a la hora de inspirarse.
La Costa Brava debe su nombre de “Costa Salvaje” a su trazado tormentoso. Su naturaleza, el clima, la historia, lo pintoresco de sus puertos y de algunos pueblos tienen reputación mundial.