Rafael Muñoz Pérez, de 27 años, y Ángel Davilla-Rivas, de 22 años, se han sumado a la milicia prorrusa más violenta y temida de las que luchan en el este de Ucrania
Vinieron a España porque la situación social y económica en Ucrania empezaba a ser muy complicada, pero no imaginaban que su pas iba a convertirse en el eje de un conflicto que amenaza con desestabilizar a toda Europa